Las modas van y vienen. Los cambios de ropa, automóviles y restaurantes siguen las tendencias populares y, a menudo, son periódicos y cíclicos. Idealmente, el cambio médico no está impulsado por la moda, sino por conceptos de eficacia y seguridad, y estos conceptos deberían mejorar y perfeccionar a medida que se disponga de mejores datos. Las tendencias también son válidas en la práctica de la anestesia, donde, por ejemplo, la selección de opioides intraoperatorios ha pasado de una duración prolongada a una duración ultra corta y luego al menos parcialmente hacia atrás…